BREVE INTRODUCCION A LA CONDENSACIÓN

Para ser rápidos y concisos en la explicación, trataremos de hacerlo sin entrar en tecnificaciones, en pocas lineas y de forma muy fácil:

La condensación se genera por dos causas que están asociadas: Vapor de agua y mal aislamiento.

Cuando el vapor de agua que se genera en cualquier vivienda mediante el uso de duchas, vitrocerámicas, planchas, respiración humana o de animales, etc toca un punto que está mal aislado, se produce una importante diferencia de temperatura.

Esta diferencia de temperatura hace que el vapor al contacto de un punto frío cambie a estado líquido.

VAPOR DE AGUA AMBIENTAL + PUNTOS MAL AISLADOS = CONDENSACIÓN

Por tanto si el vapor de agua ambiental está a 25 grados y toca un punto que está a 3 grados, este pasará de un estado vaporoso a un estado líquido causando lo que conocemos como condensación.

Esto mismo sucede cuando conducimos en un día frío y se empañan los cristales de nuestro coche. El vapor de agua que producimos al respirar está más caliente que las lunas del vehículo, por eso cuando entran en contacto se produce un choque térmico por diferencia de temperaturas entre el vapor producido y las lunas del coche haciendo que se empañen.

Una vez entendido este punto ya puede tomar una decisión mucho más acertada respecto a las soluciones que ofrece el mercado.

SOLUCIONES DEFINITIVAS

Al ser una humedad que se genera en el ambiente, lo más efectivo es solucionarlo cambiando el propio ambiente.

En nuestra opinión basada en hechos, lo mejor forma de solucionarlo a mucha diferencia de otras opciones es instalar un sistema de ventilación forzada.

La Ventilación Forzada está en constante funcionamiento y hace un barrido permanente del vapor de agua que está en flotación no permitiendo a este entrar en contacto con ventanas o paredes, evitando de esta forma todos los derivados de la condensación como: malos olores, humedad en ventanas, moho en paredes, ropa, etc…

Instalar el sistema de ventilación adecuado depende de varios factores como; el tamaño de la vivienda, el número de ocupantes, la distribución de dicha vivienda, etc..

Los precios varían en función de los metros a tratar y de la funcionalidad del propio sistema, pero en promedio podría costar de 2.000€ a 4.000€ dependiendo de los metros.

Para ahondar más en este punto explore los apartados de SOLUCIONES DEFINITIVAS: Sistemas de ventilación forzada, extractores de baño y cocina, aislamiento en paredes y ventanas con rotura de puente térmico.

SOLUCIONES ALTERNATIVAS

Si por un motivo económico o de otra índole hemos descartado un VF, hay otras opciones que si bien no son definitivas, nos ayudarán mucho a disminuir la condensación.

Para ello le invitamos a que explore la pestaña LOCALIZACIÓN DE LA CONDENSACIÓN en la propia web y así sabrá la solución más conveniente en su caso dependiendo del tipo de humedad que tenga.

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Condensación: Todo lo que debes saber sobre este proceso en la vida diaria

La condensación es un proceso en el cual un gas se transforma en líquido al perder energía calórica. Se produce al enfriar el gas hasta su punto de rocío, formando pequeñas gotas sobre la superficie. Es utilizado en la destilación, obtención de agua, redes de calefacción y limpieza de gases.

Las calderas de condensación aprovechan la energía de los gases de combustión para aumentar su eficiencia y reduce las emisiones contaminantes. Controlar la humedad y prevenir problemas de condensación son aspectos importantes en el diseño de sistemas de tratamiento de aire.

Proceso de condensación

En esta sección exploraremos a fondo el fascinante proceso de condensación. Comenzaremos definiendo qué es la condensación y cómo se lleva a cabo. A continuación, analizaremos el principio fundamental de la pérdida de energía calórica durante este proceso. Seguidamente, estudiaremos detalladamente la transformación de estado gaseoso a líquido y la formación de pequeñas gotas sobre la superficie.

Definición de condensación

La condensación es un fenómeno termodinámico en el cual un gas se convierte en líquido al perder energía calórica. Este proceso ocurre cuando el gas se enfría hasta alcanzar su punto de rocío, liberando el calor retenido y formando pequeñas gotas de líquido en la superficie.

Principio de pérdida de energía calórica

La condensación se basa en el principio de que cuando un gas se enfría, disminuye su energía térmica. Al perder calor, las moléculas del gas se mueven más lentamente y se agrupan, pasando al estado líquido. Esta reducción de energía calórica es un proceso natural que ocurre en diversos entornos y es vital para múltiples aplicaciones.

Transformación de estado gaseoso a líquido

La transformación de estado gaseoso a líquido durante la condensación es un fenómeno fascinante. A medida que el gas se enfría, las moléculas se agrupan y se adhieren entre sí, formando gotas que posteriormente se depositan en la superficie. Este cambio de fase implica una reorganización molecular que resulta en una liberación de energía y la formación del líquido.

Liberación de calor latente de vaporización

Uno de los aspectos más interesantes de la condensación es la liberación de calor latente de vaporización durante el cambio de fase. Cuando el gas se enfría y se transforma en líquido, se libera energía en forma de calor. Este calor latente de vaporización es el responsable de la producción de gotas líquidas y juega un papel crucial en diversos procesos naturales y tecnológicos.

Aplicaciones de la condensación

La condensación tiene diversas aplicaciones prácticas en diferentes ámbitos. A continuación, se detallan algunas de las principales aplicaciones de este proceso:

Destilación como proceso de condensación

La destilación es un proceso basado en la condensación que se utiliza para separar componentes de una mezcla líquida. Consiste en calentar la mezcla hasta que uno de sus componentes se evapore, luego se enfría y se recolecta el componente evaporado en forma de líquido condensado. Este método se utiliza ampliamente en la industria química y en la producción de bebidas alcohólicas como el whisky o el vodka.

Obtención de agua a través de la humidificación del aire

La condensación también se utiliza para obtener agua a partir de la humidificación del aire. En lugares donde el suministro de agua potable es escaso, se emplean sistemas de condensación para extraer la humedad presente en el aire y convertirla en agua líquida. Este proceso es especialmente útil en regiones áridas o en situaciones de emergencia, como desastres naturales o zonas de conflicto.

Redes de calefacción y transporte de calor

En el ámbito de la calefacción, la condensación juega un papel fundamental en el aprovechamiento de la energía. Las redes de calefacción utilizan la condensación para transportar el calor de un lugar a otro de manera eficiente. El calor se genera en una central térmica o en una caldera y se transporta a través de tuberías.

En el proceso de condensación, el calor latente se libera en el punto de destino, proporcionando calor para diferentes usos, como la calefacción de edificios o la producción de agua caliente sanitaria.

Limpieza de gases de escape

La condensación también se emplea en la limpieza de gases de escape, especialmente en procesos industriales o en la operación de vehículos. Los sistemas de tratamiento de gases utilizan la condensación para capturar y eliminar los contaminantes presentes en los gases de escape. Los gases se enfrían y condensan, permitiendo la separación y posterior eliminación de sustancias nocivas antes de ser emitidas a la atmósfera.

Tecnología de las calderas de condensación

La tecnología de las calderas de condensación es una forma eficiente de aprovechar la energía contenida en los gases de combustión, lo que permite aumentar la eficiencia y reducir las emisiones contaminantes. Estas calderas cuentan con un intercambiador de calor adicional que permite enfriar los humos de la combustión para que condensen y liberen su calor latente.

Recuperación de energía en gases de combustión

Gracias al intercambiador de calor adicional, las calderas de condensación aprovechan al máximo el calor contenido en los gases de combustión. Los humos calientes pasan a través de este intercambiador, donde se enfrían y la energía térmica que contienen se transfiere al agua. Esto permite obtener un mayor rendimiento en comparación con las calderas convencionales, donde gran parte del calor se pierde a través de los gases de escape sin ser utilizado.

Aumento de eficiencia y reducción de emisiones

La utilización de las calderas de condensación ofrece importantes beneficios en términos de eficiencia energética y reducción de emisiones. Al aprovechar el calor latente de los gases de combustión, se logra un mayor rendimiento en la generación de calor. Esto se traduce en un ahorro de energía y una reducción en el consumo de combustible.

Además, al enfriar los gases de combustión y condensar el vapor de agua, se minimizan las emisiones contaminantes. Esto contribuye a la protección del medio ambiente y a cumplir con las regulaciones vigentes en materia de emisiones.

Funcionamiento y principios de las calderas de condensación

Las calderas de condensación, al igual que las calderas convencionales, queman combustible para generar calor. Sin embargo, la diferencia radica en la manera en que aprovechan ese calor. En las calderas de condensación, los gases de combustión se enfrían hasta alcanzar una temperatura más baja de lo habitual, lo que provoca la condensación del vapor de agua contenido en ellos.

Este proceso de condensación libera calor latente, que es recuperado por el intercambiador de calor adicional. El agua caliente se utiliza para calefacción o para generar agua caliente sanitaria.

Es importante destacar que, debido al proceso de condensación, estas calderas requieren de un sistema de evacuación de condensados.

Control de la humedad y prevención de problemas de condensación

Importancia del control de humedad en sistemas de tratamiento de aire

El control adecuado de la humedad en los sistemas de tratamiento de aire es crucial para mantener un entorno saludable y proteger la integridad de los materiales y las estructuras.

Las fluctuaciones extremas en los niveles de humedad pueden tener impactos negativos tanto en la salud de las personas como en los elementos presentes en el espacio. El exceso de humedad puede favorecer el crecimiento de moho y hongos, causando problemas respiratorios y alergias.

Por otro lado, la falta de humedad puede generar sequedad en el ambiente, afectando la calidad del aire y causando molestias en las vías respiratorias. Es por esto que realizar un control adecuado de la humedad es esencial para mantener un ambiente confortable y seguro.

Utilización de deshumidificadores y sistemas de ventilación mecánica

Para prevenir problemas de condensación y mantener niveles óptimos de humedad en los espacios interiores, se recomienda utilizar deshumidificadores y sistemas de ventilación mecánica controlada.

Los deshumidificadores son dispositivos diseñados para extraer la humedad del aire, reduciendo así la posibilidad de condensación. Estos equipos son especialmente útiles en áreas propensas a altos niveles de humedad, como sótanos, cocinas o baños.

Por otro lado, los sistemas de ventilación mecánica permiten renovar el aire de manera eficiente, eliminando la humedad y manteniendo una buena calidad del aire en el ambiente. Estos sistemas pueden ser instalados de forma centralizada en edificios o utilizarse mediante unidades individuales en espacios más pequeños.

Impactos negativos de niveles inadecuados de humedad

Los niveles inadecuados de humedad pueden tener consecuencias perjudiciales tanto para las personas como para los materiales presentes en un espacio. Cuando la humedad es demasiado alta, puede promover el desarrollo de moho y hongos, aumentando el riesgo de alergias, asma y otros problemas respiratorios.

Además, puede dañar materiales como madera, papel o tejidos, provocando deterioro y reduciendo su vida útil. Por otro lado, niveles bajos de humedad pueden causar sequedad en el ambiente, lo que puede afectar negativamente la salud respiratoria y ocasionar molestias en la piel y las vías respiratorias.

Por eso, es esencial mantener un equilibrio adecuado de humedad para garantizar un entorno seguro y confortable.

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Si tenemos humedad por condensación en toda la vivienda significa que toda su construcción está mal aislada. En general, son los muros perimetrales los que sufren este problema, ya que suelen ser los más fríos.

Este es uno de los habitáculos menos proclives para sufrir la humedad por condensación por diferentes motivos, no obstante es bastante común que ocurra cuando por ejemplo hemos cerrado una terraza que antes era exterior, o si se cambian las ventanas antiguas por unas que sean más estancas.

El baño es el habitáculo de la vivienda más proclive para sufrir la humedad por condensación. Tan sólo el vapor de agua que liberamos en la ducha o bañera cuando utilizamos el agua caliente hace que los hongos puedan proliferar en puntos proclives como en el techo o paredes.

Debido a la cocción o fritura de los alimentos así como el funcionamiento de determinados electrodomésticos como el horno o el microhondas, este es un espacio altamente proclive a condensarse.

A través de nuestra respiración, una persona exhala 3 litros de vapor por día, así que ese mismo vapor de agua que producimos mientras dormimos no es para nada desdeñable. De esta forma, cuando permanecemos tantas horas en el mismo sitio no es raro que la condensación haga su aparición en forma de hongos en las paredes, armarios o con el famoso “lloro” en las ventanas.

Si la condensación se produce dentro de los armarios, hay varias cosas que podemos hacer:

Como solución definitiva se aconseja impermeabilizar el armario con materiales específicos para ello. No dude en ponerse en contacto con nosotros para un presupuesto sin compromiso.

Básicamente por el vapor de agua ambiental y la ineficiente calidad térmica de la ventana.

Cuando el vapor de agua que hay en toda vivienda toca un punto frío como la carpintería metálica o el cristal de nuestras ventanas se produce un choque térmico por diferencia de temperatura.

Sabemos los dolores de cabeza que puede llegar a dar contar con humedades por condensación en nuestras vigas. La buena noticia es que este problema tiene solución.

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